Las bebidas alcohólicas son parte de la tradición de las diversas regiones del mundo. Cada país tiene su propio elixir, constituyéndose en una marca distintiva de culturas, tradiciones y grupos enteros. Así que si vas a degustar licores Bogotá debes saber de donde provienen y proponerte a disfrutar de una experiencia fuera de serie.
Los países no solo compiten por ver cuál es el más poderoso, desarrollado o el que cuenta con mayor cantidad de población. Las diferentes naciones también se destacan por el sabor de sus bebidas y su influencia alrededor del mundo. Los datos estadísticos que registran el número de ventas de las diferentes marcas ayudan enormemente a entender cuáles son las tendencias de los consumidores.
En ese sentido, la comercialización de diversos licores es parte de la globalización. Hoy en día es muy fácil pasar una noche de fiesta compartiendo una excelente botella de vodka o una caja de la mejor cerveza propia de Alemania. Lo que muchos ignoran es que detrás de cada sabor hay una historia.
Algunos datos sobre tus tragos favoritos
¿Sabías que el primer ron viene de la antigua Grecia? Existen indicios de que aquella sociedad reconocida por sus grandes aportes filosóficos habría hecho las primeras sustancias a base de caña de azúcar fermentada. Sin embargo, la versión del producto destilado y más elaborado fue obra de esclavos caribeños del siglo 17.
Por otro lado, el descubrimiento de la cerveza tiene un distintivo sello alemán no menor a los mil años de antigüedad. Allí la harina molida de malta se mezcló una planta llamada lúpulo, la cual le otorga la frescura y su amargo sabor característico. De no ser por esta tradición, lo que tomaríamos ahorita sería una especie de vino de malta.
Bebidas y sus funciones
Lo cierto es que cada elixir tiene una función dentro de su cultura, por ejemplo, el vodka tiene su origen en Rusia, en donde se buscaba una sustancia destilada a base de alcohol que soporta las bajas temperaturas, evitando congelarse fácilmente.
Y así todas estas bebidas tienen su razón de ser. Algunas para refrescar y otras más bien para calentar a los nativos que se enfrentan a largos inviernos; también para celebrar, generar desinhibición y estados de alergia en las personas. Así que cuando pruebes un licor recuerda que el mismo tiene una historia que contar.